La Conferencia Nacional de Organizaciones Afrocolombianas, C.N.O.A., rechaza el asesinato del joven afrodescendiente Jhon Jairo Ramírez Olaya, las amenazas de muerte a activistas de derechos humanos de la Fundación Rostros & Huellas del Sentir Humano y el desplazamiento forzado intraurbano de tres familias como consecuencia de estos hechos, ocurridos el 9 de noviembre en la ciudad de Buenaventura, Valle. Enviamos nuestra más sentida solidaridad a los familiares y seres queridos.
Lo ocurrido es una grave violación a los derechos humanos del pueblo afrocolombiano, que desarticula los procesos organizativos y de construcción de paz adelantados por los jóvenes en los territorios. Más aún cuando no se trata de un caso aislado, sino que hace parte de prácticas violentas que sistemáticamente se han presentado en contra de los jóvenes y la población afrodescendiente en Buenaventura.
Este crimen, que se da en un momento histórico en que el país avanza hacia la firma de unos acuerdos de paz en La Habana, Cuba, nos invita a pensar en los retos del post conflicto en los territorios donde habita mayoritariamente población afrocolombiana: desestructuración de grupos armados con presencia en el territorio, reconstrucción del tejido social, seguridad y garantía de la vida para los defensores de derechos humanos y constructores de paz, alternativas de vida digna y no violenta para la juventud, entre otros.
Ante este hecho la Conferencia Nacional de Organizaciones Afrocolombianas se une a las solicitudes realizadas (Fundación Rostros & Huellas del Sentir Humano. Asesinado joven afrodescendiente en Buenaventura: el paramilitarismo continúa con el exterminio. 12 de noviembre de 2015. Comunicado a la opinión pública) por la Fundación Rostros & Huellas del Sentir Humano, que:
1. Demanda ante la Fiscalía General de la Nación adelantar con celeridad, prontitud y eficacia las investigaciones para esclarecerlos, detener, juzgar y sancionar a los responsables del homicidio de JHON JAIRO RAMÍREZ OLAYA.
2. A la Unidad Nacional de Víctima, reubicar y proteger de manera inmediata a la familia de la víctima.
3. Exige al Gobierno Nacional tomar las medidas competentes y eficaces para prevenir las situaciones de riesgo como las que aquí se denuncian y que se viven todos los días en las comunidades.
4. Insiste a la Unidad Nacional de Protección otorgar urgente e inmediatamente medidas duras de protección colectivas a la organización Rostros & Huellas del Sentir Humano. Tales medidas han sido solicitadas en varias ocasiones pero la respuesta ha sido hasta ahora negativa.
5. La Unidad Nacional de Protección, acelerar la reevaluación de las medidas de protección a Leonard Renteria Vallecilla y Jorge Luis Rivas Valenzuela, y acelerar la implementación de las medidas a Víctor Angulo Advíncula, reubicarlos en un lugar seguro y adoptar las medidas que les permitan continuar con su trabajo comunitario y social con la población juvenil de Buenaventura.
6. A las organizaciones afrocolombianas y sociales del país pronunciarse sobre la violencia que se vive en las comunidades y tomar acciones en lo local, nacional e internacional para denunciar estos hecho y acompañarnos en nuestro trabajo.
7. A la comunidad internacional con presencia en Colombia, y especialmente a la Oficina en Colombia de la Alta Comisionada para los Derechos Humanos exigir al Estado Colombiano eficacia y prontitud en las medidas que debe adoptar para prevenir, investigar, y sancionar estas amenazas criminales, y brindar las garantías adecuadas para la defensa de los derechos humanos y a los defensores de derechos humanos, activistas políticos y sociales que trabajan por la construcción de un país en paz, con justicia social y sin violencia.
La CNOA reitera el llamado realizado al Gobierno Nacional el 1 de junio del presente año, en comunicado a la opinión pública: son necesarias medidas de fondo que permitan superar la crisis humanitaria que se vive en Buenaventura, el Pacífico Colombiano requiere soluciones estructurales. ¡No más jóvenes afrodescendientes víctimas de la violencia!